Pamela y su equipo habían hecho todo bien. Fundaron Essence, una marca de cosmética con propósito, ingredientes nobles y estética cuidada. Lanzaron su ecommerce, armaron sus redes, incluso hicieron una que otra campaña en Meta. Pero las ventas no despegaban. Algo no cuadraba. 😓
“Tenemos un buen producto, la web está decente, ¿por qué no convertimos?”, se preguntaban.
Ese fue el punto de partida de nuestra conversación. Pamela buscaba un apoyo que no solo hiciera anuncios, sino que entendiera su negocio. Una que pudiera diagnosticar, sugerir canales adecuados y generar contenido que realmente conectara con su audiencia.
Primero hablamos de estrategia. ¿Meta Ads? Sí. ¿Google? Podría ser, aunque al tener pocos productos y bajo reconocimiento, quizás aún no era el momento. ¿TikTok? Pamela dudaba… ¿no era solo para adolescentes? No exactamente. Hoy TikTok alberga una audiencia transversal, y para una marca nueva, puede ser un canal con excelente performance creativa si se trabaja con contenido orgánico y auténtico. 🎥✨
Existe diferencia entre hacer acciones sueltas y tener una estrategia omnicanal: campañas bien pensadas en Meta, acompañadas de contenido orgánico para TikTok o Instagram, más una newsletters con contenido educativo que aporte valor real (Inbound Marketing), no solo descuentos. 📬
Sobre el contenido: cómo se crearía, cómo se puede aprovechar en múltiples plataformas, y cómo se puede reciclar como entradas de blog para mejorar el SEO. Pamela respiró aliviada al saber que no tendría que hacer todo sola. un tercero puede diseñar, escribir y producir. Solo necesitábamos su visión y feedback.
Finalmente, Pamela también quería claridad. Un plan que detallara cada servicio, cómo se mide el éxito, y cómo se proyecta el crecimiento. Porque eso era lo que necesitaba: no solo vender más hoy, sino escalar con estrategia.
📈 Conclusión: Tener un producto increíble es solo el primer paso. La clave está en diseñar un ecosistema de marketing digital que combine canales adecuados, contenido auténtico y una medición clara. Porque cuando la estrategia es tan buena como tu producto, la magia ocurre.
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